lunes, junio 16, 2008

 

EL ATEÍSMO (12 DE 12)

Supón que te diga: "Quiero comprar un piso de seie habitaciones en París, detrás del Palacio de Luxemburgo, con vistas al parque... No quisiera gastarme más de cien mil francos; ¡espero conseguirlo, creo que lo conseguiré!". Probablemente pensarás: "Se hace ilusiones; confunde su deseo con la realidad...". Y tendrás toda la razón (aunque esto, en rigor, no demuestre nada: ¿quién dice que no vaya a dar con un chiflado dispuesto a vender?). Y cuando se te dice que Dios existe, que vamos a resucitar, etc., ¿no te parece aún más increíble que un piso de seis habitaciones detrás del Palacio de Luxemburgo por menos de cien mil francos? O tienes una idea muy mala de Dios, o una idea muy elevada de la inmobiliaria.
La posición del ateo, en cambio, es más sólida, por cuanto que la mayoría de las veces preferiría equivocarse. Esto no demuestra que tenga razón, pero lo vuelve menos sospechoso de no pensar, como tantos otros, más para consolarse o traquilizarse...
Me detendré aquí. Sólo quería sugerir algunos argumentos posibles. Corresponde a cada cual evaluar sus fuerzas y sus límites. La existencia de Dios es una posibilidad que no puede excluirse racionalmente. Esto es lo que hace del ateísmo lo que no es: no un saber sino una creencia, repitámoslo, no una certeza sino una apuesta.
Es, además, lo que debe conducirnos a todos a la tolerancia. Lo único que separa a los ateos y a los creyentes es aquello que ignoran. ¿Cómo podría esto contar más que aquello que conocen: cierta experiencia de la vida, del amor, de la humanidad sufriente y digna, pese a su miseria, de la humanidad sufriente y valerosa? Es lo que yo denomino fidelidad, que debe unir a aquellos a los que, de otro modo, su fe o su falta de fe podría enfrentar. Sería una locura matarnos los unos a los otros por aquello que ignoramos. Más vale que luchemos juntos por lo que conocemos o reconocemos: cierta idea del hombre y de la civilización, ciera forma de habitar el mundo y el misterio (¿por qué hay algo y no más bien nada?), cierta experiencia del amor y de la compasión, cierta exigencia del espíritu... Es lo que podemos denominar humanismo, que no es una religión sino una moral. Fidelidad al hombre, y a la humanidad del hombre.
Esto no sustituye a ningún Dios. No suprime ningún Dios. Pero, sin esta fidelidad, ninguna religión ni ningún ateísmo pueden ser humanamente aceptables.


André Comte-Sponville. Invitación a la filosofía


Comments:
Amén.
 
Una mujer autora - compositora - intérprete, http://www.fabienne-marsaudon.com podría estar interesada por entrar en contacto con autor-compositor-interprete español ... bueno, a ver si comunicais que puede interesaros a ambos.
Un besin soleado bretón
 
Je suis seulement un amateur, mais merci "Venga".
Manolito, c'est ta chance.
Hacefalta.
 
Si os gusta lo que hace, pues dejadle una nota en su sitio web, os lo agradecerá.
Quiere traducir sus canciones en español y divulgarlas por internet.
No sé si busca salas para actuar, en cambio.
Que lo disfrutéis.
Un besote
 
Ha salido un libro interesante y con bastante coña: "Por qué no podemos ser cristianos", de Piergiorgio Odifreddi. Merece la pena ver cómo desarma los "libros sagrados".
 
Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?